sábado, mayo 7

Saludos de camionetas

Vivo en la Calzada San Juan una de las calzadas más transitadas de la Ciudad, siempre está en movimiento.

A veces en la madrugada escucho tráilers pasar, solitarios, me pregunto que pensará el que lo maneja, en un calzada vacía, cuántas cosas habrá visto, luego pienso en mi papá, cuando viajaba a todos los departamentos me imagino que así se sentía y me da un poco de miedo, luego recuerdo su accidente donde perdió un brazo y me da tristeza, pienso en la familia del piloto que lo espera en casa y espero que no sufra ningún accidente. Son las 2.

Escucho una moto de carreras (No se mucho de motos pero me imagino que es como de carreras) Me pregunto qué hará a esa hora, ¿Quién la maneja? Quizás viene de la zona 10 en estado de ebriedad, o tal vez es alguien que trabaja por turnos y sale a esa hora ¿Qué sentirá ir por la Calzada San Juan a esa hora haciendo tanto ruido? Tiene una especie de poder al despertar a alguien, no se imagina que alguien como yo piensa en él. Son las 3.

De pronto empiezan a pasar las camionetas extraurbanas ¿Cómo lo sé? Porque tocan la bocina y se saludan, imagino que una viene del trébol y la otra de Ciudad Quetzal, los choferes se conocen porque alguna vez trabajaron juntos, o porque son de la misma empresa o de tanto verse se hacen amigos. A veces me pregunto si el chofer que escuché ayer estará vivo, o si mataron a los de la semana pasada. Son la 4. Mientras todos duermen hay familias que se levantan a las 3 para salir de sus casas y estar a las 7:30 en el trabajo. No levantarse a esa hora significa no venir a tiempo a la Ciudad. Luego me pregunto ¿Por que vives tan lejos? Me entristece, pienso en mi sobrino levantándose a las 3, ¿Qué hace un niñito levantándose cuanto todos duermen? ¿Vendrá en esa camioneta? ¿Vendrá parado o sentado? Te sorprendería saber cuanta gente viene en esos buses ¿Dormirá un rato en el bus? Cada vez que lo veo pienso que lleva más horas levantado que cualquiera, que pasa despierto 20 horas. Son las 4.

Cuando llueve pienso en vos. Cuando hay frío pienso en vos, si vienes abrigado o si traes botitas. Espero que jamás te pase nada.

Cuando los choferes se saludan pienso en vos y por qué te fuiste tan lejos.

jueves, febrero 16

Dinero y refacción

Cuando entré a la escuela tenía 5 años, no me daban dinero, únicamente llevaba de refacción un pan francés con mantequilla, miel o un banano. Tomaba de una cantimplora fresco de tamarindo, toki o agua pura. 

No me daban dinero.

La única vez que mi mamá me dio cincuenta centavos decidí comprar una 'mielita' que era como un líquido de colores empacado en una bolsita que según calculo no pesaba más de 10 gramos. Ese día estaba feliz porque por fin podría comprar algo como todos, el único problema era que no había tienda en la escuela, los niños compraban clandestinamente a un señor con sombrero a través de los agujeros de los ladrillos que daban a la calle, así que me dispuse ir a comprar una mielita.

"Señor me da una mielita" le dije a la vez que le pasé un billete de cincuenta centavos, él me lo recibió y hasta la fecha sigo esperando la mielita.

Cuando entre a la escuela primaria ya no me mandaban un francés ¡Ahora me mandaban dos! a veces con jamón, y encima me daban un quetzal. Creo que lo que ayudó a que me enviaran dos franceses fue que mi papá me compró una lonchera en Pollo Campero así que de alguna forma tenían que llenarla.


Entré a la secundaria y me seguían enviando dos franceses de refacción y un quetzal, la única diferencia era que la lonchera de Pollo Campero estaba quebrada e inservible.


Cuando decidí estudiar magisterio tenía que viajar en bus y la jornada era doble, así que me daban cinco quetzales: Uno de ida, uno de vuelta y tres para lo que quisiera comprar, y ahora de refacción y almuerzo llevaba tres franceses.

No me dan dinero.

viernes, septiembre 2

Pequeñas consideraciones con la sociedad. No. 2


Miles de personas salen de sus hogares cada mañana con la etiqueta de fuera y nadie se toma la molestia de decir "¡Ea! Joven, trae la etiqueta de la camisa de fuera" o "Señora, métase la etiqueta de la blusa". Y tampoco es mi caso. 

Mientras viajaba en un bus urbano, una señora que iba sentada tenía la etiqueta de fuera. No le quise decir pero tuve una idea: Como yo iba parada, en un bus urbano y generalmente los buses frenan abruptamente, decidí que cuando llegara mi turno de bajar del bus, gritaría "¡Parada!" a destiempo y el piloto enojado frenaría y aprovecharía para "Chocar" con la señora y accidentalmente meterle la etiqueta. 

Y así fui maquinando mi plan. Ese día me gané una cara de rabia por parte de la señora pero en el fondo me sentí feliz ya que tuve una consideración con ella para que no formara parte de las estadísticas de personas que salen cada mañana con la etiqueta de fuera. Y si, la expresión ¡Ea! tenía ganas de usarla.

jueves, junio 23

Pequeñas consideraciones con la sociedad. No. 1

Cada vez voy a un baño que no es mío, giro la perilla y me tomo cinco segundos antes de empujar la puerta. 
La razón: Tiempo. Le doy tiempo a la persona que accidentalmente ha olvidado poner el seguro para que pueda gritar "¡Está ocupado!" o lo que se le ocurra para avisarme de su existencia. 

Pequeños detalles que la sociedad no puede notar pero que en determinado momento le pueden hacer el día. 

sábado, enero 8

El Osito de la Miel

Todo sucedió mientras contemplaba un bote vacío del osito de miel. 

- Mamá, cuando era pequeña y empecé a estudiar... Creo que tenía cinco años, siempre a la hora de refacción, destapaba el osito de miel que vos me mandabas con algo para tomar, a veces era fresco de tamarindo, o limonada que era lo que vos más me enviabas.
La limonada cuando se lleva a la escuela sabe feo, talvez el bote del osito tenía algo que ver. Pero en fin, no sé por qué me enviabas alli cualquier cosa para tomar. 
Un día me enviaste atol, y me costó tomarlo, creo que pasé todo el recreo intentando que saliera hasta que le pedí a una niña... Nancy, ¿Sabés quien es verdad? 

- Si, ya sé quien es. 

- Va, pues ella me destapó el osito y pude tomar el atol.

- ¿De verdad yo hacía eso?

- No sé, en realidad no creo que la hayas hecho, pero me hubiera gustado que lo hicieras. Es más ; jamás lo hiciste, esto no es más que un recuerdo inventado.

martes, septiembre 7

La Cuna (Tergiversada)

"Yo dormí en esa cuna hasta que mis piernas salían por los barrotes. Esa cuna no era nueva, pues allí crecieron todos mis hermanos que ahora rondan los treinta y tantos. Esa cuna fué mi compañera, quizás por rehusarme a crecer y aunque suene retorcido pero ¡Yo dormía en esa cunita y mis piernas salían por los barrotes!.
Al tocar mi cuna quien muy cansada de criar a mis cuatro hermanos, crujía de dolor y dejaba escapar lágrimas de cuna, que no son más que las mismas lágrimas de un mueble: El polvo.
Yo dormí en esa cuna justo al cumplir los nueve años. Esa noche, mi cuna crujió un poco más de lo normal. Me acosté acomodando mis rodillas en los barrotes y dormí, tuve un sueño muy extraño de ésos que se tienen el día que cumples años y como es habitual el día del cumpleaños: Crecí un poco más.
Yo dormí en esa cuna hasta que cumplí nueve años. Al amanecer mi madre me encontró envuelto por el polvo; por las lágrimas de quien vió crecer a mis cuatro hermanos: Envuelto por mi cuna. Ése día al volver no encontré ni el rastro, pregunté y todos actuaron como si no existiera, es más aún siguen actuando como si jamás existió".

-Vos me contaste la base de ese relato, yo lo tergiversé.

domingo, agosto 1

No soy

Sé muchas cosas. Algunas simplemente no.
No soy persona que dá explicaciones. 
No soy la que dice te quiero fácilmente. 
No soy la que demuestra lo que siente.
No soy la que se rinde.
No soy la que tira su orgullo por un lado.
No soy la que pide ayuda.
Soy poco y a veces soy nada. 
Sabía lo que NO era hasta que llegaste vos. 
Ahora soy la nada.

sábado, julio 3

miércoles, junio 30

Diálogos normales


- ¿Qué sería de mi vida si no te hubiera conocido?

- Nada, porque no te habrías dado cuenta que me tenías que conocer, es más existe mucha gente que te perdiste de conocerla pero como no la conociste vivís normal... En este momento talvez tendrías miles de amigos o hasta el amor de tu vida, pero como nunca los conociste, estás normal.

- "Normal" Me gusta esa palabra, la aplicaré a mi vida.

Y así despedacé mi razón hasta ofrecerte los pedazos. ¿Los quisiste? ¡No! ¿Que cómo lo sé si nunca lo dijiste? Fácil, existen muchas cosas que sé sin siquiera preguntarlo, simplemente se saben, por eso no creo fácilmente, porque las cosas se saben, se ven en los ojos, se escuchan en los latidos, en la respiración,  en el aire de mentira que respiras, en el tono de tu voz. 

Normal. Me gusta esa palabra.

sábado, junio 26

Sobre princesas...

Ayer ví por primera vez una película de las princesas de Disney: "Blancanieves y los siete enanos" (Confieso que jamás ví ninguna película de esas... aprendí los nombres de las princesas por el hecho de ser maestra). Creo que quería llorar de la emoción cuando el príncipe besó a Blancanieves. (En una ocasión alguien me dijo: "¿No viste ninguna? Con razón no tenés el estereotipo de princesa tonta, a lo que yo sugerí hacerme lo que le hicieron a Merlina Adams: Encerrarla en una cabaña a ver todas las películas de Disney). Creo que de haberlas visto, mi vida sería diferente...  Al final creo que me quedé con ganas de más.

viernes, abril 30

Mis palabras

No tengo palabras para vos.
De hecho si tengo palabras, 
no son varias, son centenares, 
¡MILLONES!. 
Sólo que no te las diré,
porque no merecés ni siquiera una. 

viernes, abril 2

La Osa y sus frases

Si hay algo que me quedó grabado de la Osa fueron dos frases:
1. "Al menos tenés alguien por quien llorar" (Mientras sufría en el parqueo)
2. "Decile, si él no te dice nada decile vos, ¿Qué podés perder? lo peor que te puede pasar es que te diga que no pues". 

sábado, marzo 13

Fracción de segundo

Al levantarse alzó los ojos al cielo, pensó en su hija, que precisamente ese día cumplía años. Sabía que no tenía dinero, así que dispuso comprarle un osito de peluche, y sonrió con el hecho de imaginar los ojos de su hijita al recibir su regalo.
Ese día mi hermano lo llamó para darle indicaciones sobre un trabajo, el cual no sé exactamente de que trata, hablaron un momento y luego colgó. A los tres minutos sonó de nuevo el teléfono. Era el compañero, le dijo algo como: "Vos, aquel subió al poste y... se quemó". Mi hermano salió enseguida, cuando llegó estaban los bomberos, y él... había muerto.
Todo pasó en una fracción de segundo, mi hermano sólo alcanzó a ver las manos carbonizadas y eso fué suficiente para que no pudiera pegar un ojo en toda la noche y seguir sin creer que acababa de hablar con él. Cuando fué a traer el carro, justo en el asiento del copiloto estaba el osito de peluche.
¿Cómo se llamaba él? ¿Qué pasó con la esposa y los tres hijitos? ¿Entregaron el osito de peluche? ¿Cuántos años cumplía la hija? ¿Cuál fué su reacción? ¿Le dieron el osito? ¿Quién se lo entregó? ¿Qué le dijo la persona que se lo entregó? 
Preguntas sin respuesta, no sé si las responderá alguien, no sé si tendré el valor de preguntar.

domingo, marzo 7

El señor que vende dulces, Mis adentros y Yo

Mis adentros: &%#!!! Pasó el bus y en mis narices
(El señor que vende dulces bajo del bus y se sentó cerca)
El señor: ¿Mejor en la sombra va?
El señor: Si porque blablabla..
Mis adentros: ¡Si es conmigo la plática!
Yo: ¿Perdón?
El señor: ¡Qué calor hace va!
Yo: Asentí con la cabeza.
El señor: ¿Para donde vas?
El señor: ¿Para la U va?
Yo: Asentí con la cabeza
El señor: ¿Sos menor de edad va?
Yo: Asentí con la cabeza
Mis adentros: jajaja
El señor: Si. Se te nota por tu carita
Mis adentros: jajaja y más jajaja
El señor: ¿Y qué dicen tus papás de que estés en la U?
Yo: mmm, nada están felices.
Mis adentros: Si pues! Más tu padre!
El señor: ¿Estás soltera?
Mis adentros: &%#"/! No viene ningún bus que me lleve lejos de este señor.
Yo: Si.
El señor: Yo también.
Mis adentros: Si pues! Tremendo señor con unos 40 años está "Soltero"
El señor: Si, vas a creer que no me he casado.
Mis adentros: Oh! Increible que alguien como "usté" no se haya casado ¿Y a mi qué? ¡Bien por usted! ¿no? ¡Lo felicito!
El señor: ¿Y qué estudias en la U?
Mis adentros: No se me ocurre ninguna carrera que no sea arquitectura o diseño!
Yo: ¿Perdón?
Mis adentros: Así gano tiempo en lo que repite la pregunta y pienso.
El señor: ¿Y qué estudias en la U?
Yo: ammm administración
Mis adentros: ¡Bien dicho! Pero Mora en lugar de seguir la conversación deberías de ignorarlo
Yo para mis adentros: No puedo, no sé como dejar de hablarle de la nada
El señor: ¿Y allí en la U pueden ir a visitar los novios?
Yo: No sé... Supongo...
El señor: Yo me gano la vida vendiendo dulces en los buses.
Mis adentros: ¿Y a mi qué? (otra vez) Bien por usted, lo felicito. Aunque pensándolo bien si una bolsa trae 100 dulces y son  4 por un quetzal son Q25.00 pongamos que vende unas 8 bolsas al día son Q200.00 diarios y así con ganas de vender saca unos Q300.00 por 6 días a la semana que trabaja son Q1,800.00 semanales por 4 y pongamos que me lo dé todo a mi jajaja
(Mientras hacía mis intentos de cálculo, ¡Dios! Que mala soy para eso! El señor me siguió hablando)
El señor: Blablabla entonces si me das tu número te podría ir a visitar a la U...
Mis adentros: ¡Oh!
Yo: Negué con la cabeza
El señor: ¿No quisieras salir conmigo un día?
Mis adentros: ¡Como que acabara de decir que Dios no existe!
Yo: ¡No!
Mis adentros: Mira allí viene un bus, te bajas en el trébol y abordas otro allí..
(Sin más paré el bus y subí)
Mis adentros: Con que no vaya a subir al mismo bus y luego de vender se siente a la par tuya...

(Ya sentada en el bus...) 
Mis adentos: ¿No que no pues?
Yo: ¿Qué cosa?
Mis adentros: ¿No que no podías dejar de hablarle a alguien así de la nada? ni adiós le dijiste
Mis adentros: ¡Mirá! Tu mora está en el anuncio de Pops! Del helado de mora-vainilla
Yo: ¡Cierto!
(Y así continuó el viaje, con sentimientos encontrados sobre la plática más incómoda del año, y pensando en lo bien que se siente tener a tus adentros para compartir cualquier pendejada... )

viernes, febrero 26

Palabras

Animal que no me agrada: el gato
Me gusta: Los días de viento de noviembre
Día perfecto: Caminar sin rumbo por el centro.
Objeto: Tijera
Deseo: Una virula
Poder: Telequinesis
Libro: Cien años de soledad
Cosa que no uso: Reloj
Animal que tengo fijo en la mente: gato 
Dificultad: Diferenciar derecha de izquierda y decir la hora en reloj análogo
Serie que no recordaba: Doggie Howser
Profesión: Maestra
Amigos: Uno 
Zahir: Vos
Lugar: Taco Bell
No soy: Alguien que se arrastra. (Aunque pensándolo bien...)
Recuerdo: El bolo que me pidió prestado un quetzal y cuando le dije que no tenía me dijo: "Es que me faltan    30 centavos"...
Idas a misa: Una
Ultima vez que me ruboricé: Hoy 
Miedo: Que a un niño se le salga un ojo
Epifanías: Las odio, es mejor no ver la realidad
Ahora: Estornudé
Al medio día: Caminé cinco cuadras para abordar el bus y luego pasó enfrente de mi lugar de trabajo ¬¬
Defecto y/o virtud: Orgullo
Defecto y/o virtud: Locura
Defecto y/o virtud: Soledad
Defecto y/o virtud: Demencia
Defecto y/o virtud: Cinismo
Defecto y/o virtud: Sarcasmo
Defecto y/o virtud: Alegría sin razón
Si en mis manos estuviera: Le daría de bofetadas a la gente
Lucho a diario: Con no cortarme el pelo
Animal: Vos
Bebida: Horchata
Golosina: Chocolate
Fruta con pepita y limón: El mango amarillo
Shute: ¿Mande?
Llanto: Cuando maltratan a los animales
Risa: Cuando estoy demasiado cómoda
No soy: Alguien que ruega
Defecto y/o virtud: Sinceridad desmedida
Defecto y/o virtud: Tener ojos expresivos
Al decir "Te quiero": Es porque en verdad lo siento
No hay nada como: La adrenalina pura
Día sagrado: Sábado (Ideal para dormir todo lo que pueda)
Fecha: "Ésa" que vos pensaste... 
Palabras: No son nada más que palabras...



sábado, febrero 20

Sabiduría de Mr. Long B.

En palabras de Mr. Long B
"Uno de hombre es bien mula, porque piensa que contándole a la chava que te gusta acerca de otra que supuestamente te gusta, pensás que ella te va a querer más.."

martes, febrero 16

Acróstico

 Corazón, corazón, ¿Estás bien?
 Un día preguntó angustiado
"B"oy a conseguirte un doctor
 O un cirujano.
                        - Emily 9 años.

lunes, febrero 8

No me pensés!

Y si de pronto me levanto y te digo:
¡Ya no me pensés! Ni cuando vayas por la calle y veás al vagabundo ese, ni cuando caminés hacia tu destino, ni cuando encontrés algo que no tenga nada que ver conmigo; como una lavadora, como un cepillo, como un pedazo de tela viejo, como un resorte retorcido, como tus llaves, como tus sueños, como las ventanas, como los espejos... ¡Simplemente ya no me pensés, y dedica tu tiempo a no recordar!

viernes, enero 29

Efectivamente, algo mora en mi cabeza, más no sé... Han pasado muchas cosas y sobretodo ha pasado nada. 
Cierto día un niño me estaba contando una historia que decía más o menos así: "Y fíjese que el señor vino y pa! le dió un balazo en el corazón, luego vino y pa! ¡Le dió en la mente!". Fué cuando yo lo interrumpí y le dije: ¡Dios mio! Sé lo que es eso